CAPACITACIONES OBLIGATORIAS (SUGERIDAS ANTES QUE FINALICE EL 1º SEMESTRE)
a. Convivencia Escolar:
Ley N° 20.845: Esta ley establece el "Sistema de Garantías de Derechos de la Niñez" e incluye la normativa sobre convivencia escolar. En particular, el artículo 24 menciona la obligación de los establecimientos educativos de garantizar una convivencia adecuada y de realizar capacitaciones relacionadas.
b. LEY TEA:
Ley N° 21.545: Esta ley establece normas sobre la inclusión y el respeto a los derechos de los estudiantes con Trastornos del Espectro Autista. Específicamente, se destaca la obligación de capacitar al personal docente y no docente en temas relacionados con el trato y la atención a estos estudiantes.
Ambas leyes enfatizan la importancia de la capacitación en temas de convivencia escolar y atención a la diversidad en el sistema educativo, siendo esenciales para garantizar un entorno de aprendizaje adecuado y respetuoso.
Para nosotros, como docentes y directivos, es fundamental ofrecer un servicio de calidad y muy vocacional. Hemos recibido excelentes comentarios de muchos directivos y personal docente de los colegios que hemos capacitado. En 2024, capacitamos a más de 120 colegios.
Es fundamental capacitar a la comunidad educativa sobre la Ley Karin y la nueva Ley de Convivencia para que todos conozcan sus derechos y responsabilidades, contribuyendo así a la prevención del acoso y la violencia en el entorno escolar. Ambas leyes están diseñadas para promover un ambiente seguro y respetuoso en los colegios, y su correcta implementación garantizará el bienestar de todos los integrantes de la comunidad educativa.
La capacitación en el marco de estas leyes trae consigo numerosos beneficios:
Promueve un ambiente de respeto y solidaridad: Al fomentar conocimientos y habilidades sociales se cultiva un clima de convivencia armónica.
Fomenta la empatía y el respeto: A través de actividades formativas se desarrollan habilidades que permiten comprender y valorar las diferencias entre las personas.
Contribuye a formar una sociedad más consciente y respetuosa: Esto se logra al enseñar a los estudiantes y trabajadores sobre la importancia de la convivencia pacífica.
Mejora el clima laboral: Un entorno bien gestionado impacta positivamente el funcionamiento del equipo educativo.
Fortalece la confianza y seguridad en la comunidad escolar: Todos llegarán a sentir que sus derechos son protegidos y que pueden hacer valer sus necesidades.
Ayuda a cumplir con las normativas legales: La capacitación ayuda a escolarizar a los integrantes sobre las leyes que regulan sus derechos y responsabilidades.
La Ley Karin busca:
Proteger a los estudiantes (se explica más abajo) y al personal educativo: Implementando medidas que resguarden su bienestar y seguridad.
Establecer protocolos claros para prevenir y manejar situaciones de acoso y violencia: Asegurando la actuación rápida y efectiva frente a incidentes.
Promover la creación de espacios seguros y acogedores: Donde cada miembro de la comunidad educativa se sienta valorado y respetado.
Fomentar el respeto y la inclusión: Promoviendo un ambiente en el que todos se sientan bienvenidos.
Establecer mecanismos de apoyo para las víctimas: Proporcionando recursos y ayuda a quienes han sufrido acoso o violencia.
La nueva Ley de Convivencia tiene cuatro ejes fundamentales que refuerzan la estructura de la convivencia en el ámbito escolar y se alinean perfectamente con los objetivos de la Ley Karin:
Rol del Estado para la promoción de la buena convivencia:
Se requiere que el Estado adopte medidas para promover la convivencia educativa y el buen trato, desarrollando estrategias que resguarden a las comunidades.
La consagración de la Política Nacional de Convivencia Educativa (PNCE) permitirá un marco general para el sistema educativo.
Debe haber coordinaciones entre el Ministerio de Educación y otros ministerios para abordar la convivencia desde diferentes perspectivas.
Refuerzo de los equipos y facultades de la Superintendencia de Educación para supervisar y evaluar.
Creación de un Observatorio de la Convivencia y la implementación de un Sistema Nacional de Monitoreo para supervisar la convivencia educativa.
Nuevo estándar para la gestión de la convivencia:
Se establece una nueva regulación del Plan de Gestión de Convivencia y los Reglamentos Internos, con especificaciones sobre procedimientos de información y denuncia.
Se promoverá un enfoque formativo y participativo en la elaboración y difusión de los instrumentos internos.
Es obligatorio que todos los establecimientos cuenten con un coordinador de convivencia con dedicación exclusiva y jornada completa.
Reforzamiento de deberes de sostenedores y establecimientos:
Los establecimientos deberán adoptar medidas preventivas y activar protocolos de forma oportuna.
Los sostenedores deben garantizar la actuación efectiva del establecimiento en la gestión de la convivencia, promoviendo la participación activa de la comunidad.
Promoción y protección del bienestar de los equipos educativos:
Actualización del Estatuto Docente y la regulación de las características del sector educacional en la prevención del acoso sexual laboral, acoso laboral y violencia en el trabajo.
Se establecen medidas de protección para trabajadores que han sido agredidos por estudiantes o apoderados.
Incorporación de indicadores de convivencia y seguridad en la calificación de enfermedades profesionales relacionadas con la salud mental.
Refuerzo del deber de protección de docentes y asistentes frente a hechos constitutivos de delito.
Para implementar efectivamente la Ley Karin y la nueva Ley de Convivencia, es fundamental realizar:
Talleres y Charlas: Que informen sobre los derechos y responsabilidades de cada miembro de la comunidad en la convivencia escolar.
Actividades que fomenten la empatía y el respeto: Dinámicas que ayuden a construir relaciones interpersonales basadas en la confianza y el respeto mutuo.
Capacitación para implementar protocolos de prevención y sanción: Instruir a los educadores y administrativos sobre cómo manejar adecuadamente incidentes de acoso y violencia.
Capacitación para adaptar el Reglamento Interno de Orden, Higiene y Seguridad: Asegurando que cumpla con los nuevos estándares establecidos por ambas leyes.
La capacitación sobre la Ley Karin y la nueva Ley de Convivencia no solo es una obligación legal, sino también una oportunidad para construir comunidades educativas más fuertes y resilientes. Al fomentar un ambiente de respeto y colaboración, los colegios estarán mejor preparados para enfrentar los desafíos relacionados con la convivencia y garantizar la seguridad de todos sus miembros.
¿Qué dice EDUCLA sobre KARIN y su relación con la NUEVA LEY DE CONVIVENCIA?
Sí, la Ley Karin aplica tanto a los estudiantes como al personal educativo. Su objetivo es proteger a todos los miembros de la comunidad educativa, garantizando un ambiente seguro y respetuoso.
Aquí tienes algo más claro del objetivo relacionado con la protección de estudiantes y personal educativo, enfatizando que ambos grupos están incluidos:
Proteger a los estudiantes y al personal educativo: La Ley Karin implementa medidas que resguardan el bienestar y la seguridad de todos los miembros de la comunidad educativa. Esto significa que no solo se busca proteger a los docentes y al personal administrativo, sino también a todos los estudiantes, asegurando que todos puedan aprender y desarrollarse en un entorno libre de acoso, violencia y discriminación.
Esta protección se realiza a través de la creación de protocolos claros para la prevención y manejo de situaciones de acoso y violencia, así como la promoción de un ambiente de respeto y convivencia pacífica.